Es una nueva era para los trabajadores desde el estallido de la crisis del covid-19. Muchas empresas han decidido no tener oficinas y la deslocalización de trabajadores se ha acentuado. Y aunque los movimientos son lentos, existe una guerra por atraer este tipo de trabajadores, que normalmente son de alta cualificación y buenos salarios.
España es destino atractivo pero tiene una gran pega, su sistema impositivo. Y entre todos los impuestos el más incomprendido por los extranjeros es el de patrimonio, principalmente porque no existe en casi ningún país del mundo.