Aunque todavía no sabemos si debido a la pandemia podremos disfrutar de los largos días de playa en nuestro arenal favorito, hoy queremos homenajear algunas de las playas más peculiares de nuestro país. Darse un chapuzón, comer de bocadillo o leer al sol son algunos de los placeres del verano.
La caja fuerte flexible y portátil para los amantes de la playa
Si quieres descubrir nuevos territorios, sorprenderte con paisajes únicos o bucear en los rincones más bellos de la geografía española, repasamos cuáles son las playas más raras y sorprendentes de España.
Gulpiyuri (Asturias)
La playa de Gulpiyuri, situada en la costa asturiana, entre Llanes y Ribadesella, es una de las más pequeñas del mundo, pues tiene una longitud de 50 metros. Es de caracter interior, está declarada Monumento Natural y se ha producido debido al efecto de la erosión. Solamente podrás acceder caminando.
Playa de Rodas (Pontevedra)
En pleno corazón de las Islas Cíes en la costa pontevedresa, son consideradas el Caribe gallego. The Guardian la declaró la mejor playa del mundo en 2007 y en el sondeo del periódico 20 minutos fue considerada la mejor playa de España durante tres años. Únicamente podrás llegar a este paradisíaco enclave en barco.
Playa de las catedrales (Lugo)
La playa de las Catedrales en la localidad lucense de Ribadeo se trata de uno de los puntos más emblemáticos de la costa cantábrica. Apodada así por la similitud de sus rocas con los arbotantes de las catedrales góticas, el arenal muestra espectaculares arcos, fruto de la erosión marítima, de hasta 30 metros de altura.
Cala Macarelleta (Menorca)
Cala Macarelleta parece una piscina marítima en medio del paraíso. Se trata de un secreto rincón ubicado en la isla balear de Menorca. Destacan sus aguas azuladas y su minúsculo tamaño, de apenas 20 por 40 metros. Se encuentra en el Àrea Natural d’Especial Interès de la Costa Sur de Ciutadella.
Playa de Sakoneta (Guipúzcoa)
La playa salvaje de Sakoneta está situada entre las localidades de Zumaia y Deba y tiene carácter nudista. Tiene un acceso complicado -se accede a pie tras veinte minutos de caminata- y en ella se puede apreciar el fenómeno geológico del flysch, sobre todo con marea baja. Destacan la belleza de su paisaje y en la cercanía, en el corazón e su casco histórico la presencia de la Iglesia de Santa María de Deba, Monumento Nacional y joya del gótico vasco.
Atlantis (Ibiza)
Es un lugar mágico y único en Ibiza, especialmente debido a su asociación con la cultura hippie y las numerosas esculturas humanas esculpidas en su entorno natural. El nombre auténtico del lugar es Sa Pedrera de Cala d’Hort, en referencia al antiguo uso como cantera del lugar. El paisaje onírico está repleto de peces tallados en la roca, budas, figuras hindúes y llamamientos a la paz.
Charco Verde (Lanzarote)
El Lago Verde o Charco de Los Clicos es toda una singularidad para amantes de las excursiones o de la fotografía. Este fenómeno debe su origen a la afloración de agua marina en superficie, dada la singularidad topográfica del terreno. Se trata de una laguna conectada al mar por grietas subterráneas y separada del mar por una playa de arena. Su característica tonalidad verde se debe a la presencia de gran cantidad de organismos vegetales en suspensión.
De hecho, el topónimo alude a los clicos, nombre de los mariscos comestibles abundantes pero extinguidos por dos tortugas. Eso sí, debes saber que el baño está prohibido, debido a que la playa está ubicada en el entorno el Parque Natural de Los Volcanes.
Imagen de portada | Andrés Alvarado/Flickr