Hace una semana fue aprobada la rebaja de impuestos de la electricidad. Hasta final de año y siempre que el precio mayorista supere los 45 euros por MWh, el IVA será del 10% en lugar del 21%. Sin embargo hay un colectivo que con casi total seguridad queda excluido de esta rebaja: los clientes que tienen calefacción eléctrica.
Y es que el mercado lleva empujando a que usemos combustibles fósiles para la calefacción desde hace años. La sustitución del carbón por gasoil o gas ha sido abrumadora y los pocos que se han decantado por sistemas eléctricos serán penalizados por esta reforma.