Desde 2012, un grupo de ciberdelincuentes ha estado plantando pruebas incriminatorias en los dispositivos de activistas pro-derechos humanos, abogados y periodistas de la India con el fin de provocar su detención por las autoridades, según ha descubierto y desvelado ahora la compañía de ciberseguridad estadounidense SentinelOne.
Según explica una de sus investigadores, Tom Hegel, en su blog corporativo, su objetivo